¿QUÉ ES EL REBIRTHING?

En el año 1974, el estadounidense Leonard Orr, después de una década de experimentación, estableció las bases del Renacimiento y su práctica se expandió rápidamente por todo el mundo, alcanzando a miles de personas. Sus beneficios, derivados de la liberación del mecanismo respiratorio, son múltiples y se generan a partir de un ciclo aproximado de 10 sesiones individuales, tras el cual la persona queda profundamente transformada, renacida... Al igual que en EFT, en Rebirthing consideramos que las situaciones traumáticas dejan huellas en los cuerpos sútiles, - 'nudos' energéticos-, que esta peculiar técnica de respiración nos permite disolver.  

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¿CÓMO SE DESENVUELVE UNA SESIÓN?

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Una sesión de Rebirthing dura un par de horas, de las que más de la mitad están dedicadas a la respiración. La persona está tumbada y se le guía el ritmo respiratorio hasta llevarla a una respiración fluida, libre y conectada con la energía. La persona entra entonces en lo que llamamos 'ciclo de energía', que suele ser muy placentero y en el cual deja partir tensiones y bloqueos y aprende a fluir y abrirse a la vida. Antes de la sesión de respiración, hay un compartir entre el renacedor y la persona sobre los temas más importantes en su vida en este momento, lo que tiene por efecto de llevar a su atención (aunque sea de forma inconsciente) los bloqueos que la respiración disolverá posteriormente. En cada sesión se enseñan y practican diferentes técnicas de psicología espiritual que son fáciles de aplicar en la vida cotidiana y que nos ayudan a superar limites y conseguir nuestros objetivos. De una sesión se sale fresco y ligero, y a lo largo de los días siguientes se empieza a notar cambios positivos en la forma de ser, de actuar y de percibir las situaciones. Después de un ciclo completo de sesiones, notaremos como hemos cambiado por completo nuestra forma de respirar, con una respiración sosegada y equilibrada en todo momento. 

¿CUAL ES LA CARACTERÍSTICA DE ESTA TÉCNICA RESPIRATORIA?

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La técnica es muy sencilla y tiene dos características básicas: es consciente y conectada. Consciente, porque habitualmente respiramos de forma errática sin estar conscientes que lo hacemos; y conectada, porque unimos la exhalación con la inhalación, de tal forma que no quede espacio entre una y otra. Esta forma de respirar primero nos relaja, y luego hace que comiencen a surgir recuerdos de nuestro pasado, pudiendo llegar al nacimiento y a veces a nuestra vida intrauterina (suele ocurrir en un nivel avanzado, al hacer sesiones sumergido en agua). Aunque se trate de un ritmo respiratorio muy rápido, no se trata de hiperventilación: al poner énfasis en la inhalación y no forzar la exhalación, no se produce una excesiva eliminación de dióxido de carbono, que es lo que causa el síndrome de la hiperventilación. A nivel estrictamente físico, esta forma de respiración provoca en la sangre un aflujo de oxígeno que permite una depuración en profundidad: durante las primeras sesiones, es bastante común tener que levantarse a 'evacuar' varias veces a lo largo de la sesión, y también padecer cierta somnolencia provocada por el tránsito de las toxinas liberadas en la sangre. No sólo inhalamos más oxígeno sino también más 'prana', el nombre sánscrito dado a la energía vital esencial a la vida (se llama también 'chi' en la tradición china o 'ki' para los japoneses); eso provoca una purificación a nivel energético, que podemos sentir durante la sesión. Notamos de forma concreta como la respiración va 'escaneando' el cuerpo y disolviendo los bloqueos, provocando a veces tetania en la boca, las manos o las piernas. Después de un ciclo de sesiones con un renacedor cualificado, la persona estará capacitada para llevar a cabo sus propias sesiones de respiración en solitario.  

¿QUÉ ASPECTOS PSICOLÓGICOS TRATA?



Principalmente, el rebirthing nos ayuda a superar y sanar el trauma del nacimiento. Al nacer vivimos el choque de pasar de un ambiente líquido a un ambiente aéreo, de un sitio calentito, agradable y seguro a un lugar desconocido, frío, hostíl e iluminado en exceso. La gran mayoría de los nacimientos en hospitales suponen el corte del cordón umbilical de forma prematura, las prisas, el acelerar las contracciones de la madre de manera artificial, la falta de armonía, los ruidos, el uso extendido de las cesáreas, etc... Por culpa de estas circustancias, al nacer el bebé saca sus ya primeras conclusiones negativas sobre la vida (como 'no soy bienvenido', 'la vida es una lucha', 'la vida es dolor',...), y estos 'programas', -este guión de nacimiento-, se repetirán luego una y otra vez en nuestra vida. Por ejemplo una persona que no se sintió amada al nacer tendrá tendencia a no sentirse amada y a atraer circunstancias en las cuales no se siente amada. Es muy gratificante aprender a transformar las partes negativas de nuestro guión de nacimiento y observar como va cambiando nuestra vida.​ Además del trauma del nacimiento, se trabajan también otros aspectos fundamentales: el síndrome de desaprobación materno/paterno, el perdón, la autoestima, los pensamientos negativos inconscientes ('no puedo', 'no merezco', 'no valgo', 'soy culpable', etc.), el impulso inconsciente de muerte, otras vidas anteriores, la longevidad, la purificación espiritual, la prosperidad y la abundancia, las relaciones y la sexualidad.